Sorprenden in fraganti a seis taxistas ilegales en El Campello

La Policía Local identifica y expedienta a los conductores, que se enfrentan a multas de hasta 4.000 euros

Uno de los vehículos que hacía de taxi

Uno de los vehículos que hacía de taxi / INFORMACIÓN

L. Gil López

L. Gil López

Con la llegada de la temporada turística alta y la llegada masiva de visitantes, en la costa proliferan los servicios ilegales de transporte con vehículos particulares, que realizan servicios a municipios, hoteles y apartamentos turísticos desde el aeropuerto, estación de ferrocarril y otras terminales de pasajeros.

Es precisamente en estas fechas cuando la Policía Local de El Campello, al igual que otros cuerpos de muchos más municipios, activan un dispositivo especial de vigilancia y localización de estos taxis “ilegales”, que suponen una competencia desleal a los servicios reglamentados de transporte viajeros por carretera.

Por ello, de forma aleatoria se instalan controles, sobre todo por las noches, dado que el volumen de tráfico diurno dificulta estos operativos, según explican fuentes municipales.

De esta forma, los agentes del turno de noche de la Policía Local de El Campello han identificado y expedientado en los últimos días a seis de estos taxistas ilegales, con los que los usuarios reconocen haber contactado por teléfonos que se facilitan en redes sociales y páginas web.

Uno de los vehículos identificado

Uno de los vehículos identificado / INFORMACIÓN

Según señalan los agentes actuantes, estos vehículos cobran tarifas más reducidas que los legales, como acaban confesando los clientes, y no emiten factura ni recibo alguno por los servicios.

Los seis conductores detectados han sido expedientados y propuestos para sanción en aplicación del articulado de la Ley de Transporte, que establece multas para ellos de hasta 4.000 euros, según las mismas fuentes.

Los seis casos fueron pillados in fraganti en controles rutinarios, o bien subiendo o descargando clientes, que se sientan en la parte trasera del vehículo, viajando en la delantera únicamente al conductor, lo que ya levanta sospechas a los policías.