La histórica construcción que se encuentra escondida en una montaña de Alicante

Una experta de la UA comparte una publicación que sirve para recordar el valor histórico y arquitectónico de un recinto de más de 100 años de antigüedad que permanece abandonado

Como si fuera un tesoro enterrado bajo tierra. Esta es la situación en la que se encuentra gran parte de una histórica construcción de Alicante, oculta no en la arena, sino en el corazón de una montaña. Más acertada es la metáfora elegida por Esmeralda Martínez, arquitecta y geógrafa de la UA, y autora de un hilo (de más que recomendable lectura) que descubre el origen, la trayectoria y las particularidades de la edificación en cuestión, ubicada en el núcleo de una cima, que "como si de un huevo de Pascua se tratara, esconde uno de los patrimonios industriales más singulares de España".

Así lo cuenta la propia responsable de una publicación que ya supera las mil interacciones y que ha recibido decenas de comentarios, y que sirve de homenaje a una instalación que forma parte de la historia de Alicante. De hecho, su rastro aún es visible en el emplazamiento en el que un día se erigió y en el que hoy permanece olvidada, la Serra Grossa, "un lugar de especial valor geológico y gran belleza" sobre el que hace más de 100 años se levantó la refinería La Británica, cuyo presencia quedó grabada para la posteridad.

"Las huellas de sus construcciones perviven hoy como cicatrices dibujadas en los muros de contención al pie de la sierra", explica la responsable de una divulgativa cadena de tuits en las que adjunta diversas fotografías que muestran los vestigios que este complejo industrial dejó grabados en esta zona de la ciudad. Por encima de cualquier otro, destaca un gran depósito de 8.000 m3, que se sitúa "incrustado en la ladera" como un elemento más del paisaje litoral.

Mucho más escondida está la que se puede considerar como la pieza más valiosa del recinto, a resguardo de las inclemencias climatológicas y protegida de las miradas. Quién sabe también si de la memoria. Y es que es bajo el suelo donde se ubica la factoría (lógicamente denominada) subterránea, una red de depósitos actualmente apagada pero que en su día funcionó como un gran almacén de crudo. Este espacio consta de tres galerías y "sus espectaculares salas abovedados son, posiblemente, uno de los ejemplos más relevantes del patrimonio industrial de la Comunidad Valenciana". Esa es la definición que utiliza la experta de la UA, que señala que estas estructuras "se encuentran actualmente en buen estado de conservación pero abandonadas y en desuso".

Estos pasajes integraron en 2021 un anteproyecto presentado por el Ayuntamiento que aspiraba a convertir la instalación en un centro cultural compuesto por diferentes espacios, como un salón polivalente destinado a la celebración de eventos, una cafetería y varios miradores. En la actualidad, la propuesta permanece en standby, guardada en el cajón de los deseos dormidos que despertarán cuando las buenas intenciones y la voluntad expresada por ambas partes (consistorio y Gobierno) se traduzca en un acuerdo firme.

Las imágenes del proyecto se pueden consultar en el hilo publicado en Twitter, en el que hay un lugar destacado para fotografías de época que ayudan a entender el incalculable valor histórico y arquitectónico que atesora este lugar. En ellas, y en el texto que las acompaña y que se encarga de aportar la información necesaria, se puede apreciar cuál y cómo fue el inicio de la refinería, antes fundición, y también, los cambios que esta zona de Alicante ha experimentado a lo largo de los años, y que la han conducido a ser, desde hace más de una década, una parte del recorrido del TRAM que es respetuosa con su pasado y con el entorno que le rodea.