Las conexiones entre barrios a través del futuro Parque Central centran las propuestas de los vecinos

Una treintena de residentes acuden a la primera jornada de participación, incluida en la consulta pública, sobre el proyecto urbanístico que afecta a entornos como Princesa Mercedes, Benalúa, Florida y el PAU 1

Lydia Ferrándiz

Lydia Ferrándiz

Pasos peatonales, carriles bici, transporte urbano y una movilidad fluida para los vehículos. Las conexiones entre los barrios que rodearán al futuro Parque Central de Alicante han centrado las dudas y las propuestas de los vecinos que este martes se acercaron a la primera jornada de consulta pública organizada por el Ayuntamiento y Avant. Este primer encuentro de puertas abiertas contó con la asistencia de una treintena de residentes que acudieron, tanto como representantes de entidades así como de forma individual, a resolver sus dudas acerca del proyecto y a realizar en primera persona aquellas propuestas que no quieren que se queden al margen en la construcción de una infraestructura que cambiará el paisaje de la ciudad. 

Desde San Blas a Princesa Mercedes, pasando por Benalúa, La Florida o el PAU 1, este proceso de participación pública no deja indiferente a nadie. La sesión, que consistió en una dinámica por grupos en la que los asistentes pudieron dejar sus impresiones mediante pósits de colores ubicados sobre un gran mapa del proyecto del Parque Central, estuvo moderada por la directora general de PGOU del Ayuntamiento, Leticia Martín, y la arquitecta encargada de la consulta pública, Esmeralda Martínez, y contó con la intervención de la concejala de Urbanismo, Rocío Gómez, y del director de Avant, Javier Martínez.

Una vez se dio inicio a la dinámica, los asistentes pudieron hablar con sus acompañantes para dejar constancia de sus reclamaciones. Isabel Molina, portavoz de la plataforma Renfe, señaló que tienen «unas condiciones: que se haga el parque y que no se supriman el paso a nivel o el autobús, porque el barrio lo necesita». Por ello, Molina expresó su deseo de que «haya pasos transversales por el barrio, aparte del Puente Rojo y la Vía Parque porque Alicante se merece tener una estación que va a ser el futuro de la ciudad».

Rosa Verdú, vecina de Princesa Mercedes, indicó que lo que buscan es que este proyecto «sea lo mejor para nuestro barrio, que tengamos accesos suficientes y que nos quedemos incomunicados de los barrios que tenemos más cerca». «Queremos que quede una buena zona conectada bien con San Blas, algo que nunca hemos tenido y que no vuelvan a cortar el tráfico de vehículos a nuestro barrio», añadió la residente.

Al otro lado de las vías, Mari Carmen Muñoz, vecina del PAU 1, planteó una propuesta específica para el parque. «Queremos un parque para perros que se integre en el Parque Central. He observado que hay muchos parques nuevos en la ciudad que los dejan muy bonitos, pero luego no dejan entrar a perros a pasear. Queremos que haya una zona para perros en el nuevo Parque Central, donde los dueños puedan pasear siendo educados, atados y recogiendo las cacas», señaló.

En Benalúa, Fernando Quiles, aseguró que existe división de opiniones. «Hay división de opiniones sobre la ubicación de la intermodal, vemos que se come una gran parte del parque y hubiera sido mejor llevarla más hacia el interior». Por ello, Quiles ha expresado que «lo que pedimos para el barrio es un centro social, un centro sanitario, colegios y zonas verdes, aunque lo que necesita el centro es un pulmón verde, pero no una intermodal como se está planteando, con la que mucha gente de Benalúa no está de acuerdo». 

Carmen Sánchez, vecina de San Blas, aprovechó la reunión para mostrar sus preocupaciones. A su juicio, «nos preocupan el futuro de la estación histórica y el Puente Rojo. Queremos un pulmón verde». Además, Sánchez ha destacado la importancia de que «queremos que haya espacios para bicicletas que conecten con un cinturón verde con la ciudad y con el centro y que haya un gran pulmón verde en la ciudad y un gran corredor verde con una movilidad adecuada».

Vicente Alcaraz, de la asociación de Vecinos por un Parque Central, también ha compartido su visión sobre el proyecto en la sesión grupal. En su opinión, «lo que nos interesa es que haya un parque continuo, sin cruces de vehículos motorizados en el interior, y que se empiece a hacer lo antes posible sin esperar a la construcción de viviendas».

Entre los asistentes a la reunión participativa también se encontraban dos exconcejales Gloria Vara, del PSOE, y Natxo Bellido, de Compromís.

El proyecto

El ámbito al que hace referencia este proceso participativo es el que habitualmente se conoce como Parque Central y que se corresponde con el sector OI/2 del Plan General, el lugar central de la ciudad históricamente ocupado por la infraestructura ferroviaria de la línea Alicante-Madrid, que abarca 468.925 metros cuadrados de extensión, una superficie que dominará una gran extensión verde, en la que se ubicarán distintas dotaciones y 1.433 viviendas, de las cuales el 30% serán de protección pública.

Los objetivos de este proyecto urbanístico son: crear un nuevo espacio público que vertebre la infraestructura verde municipal; transformar el vacío urbano en un espacio urbano de referencia; conectar los barrios y estos con la ciudad; corregir los déficits dotacionales de los barrios; integrar nuevos usos y diversidad de opciones de vivienda; transformar la estación y conectarla con distintos modos de transporte; e impulsar un nuevo modelo de movilidad.

Esta primera fase de participación, la consulta ciudadana, ofrece a los alicantinos la oportunidad de acceder a información detallada sobre el plan de ordenación del futuro Parque Central, que se puede consultar en alicanteparquecentral.com, una web que se ha habilitado específicamente para este proceso y desde la cual también se puede responder la encuesta de participación. En la web municipal ya se ha habilitado un enlace a esta plataforma.

La encuesta que se plantea a la ciudadanía incluye cuestiones relacionadas con el diseño de las zonas verdes, el tipo de dotaciones que consideran prioritarias, la tipología de edificación que debe prevalecer, sus preferencias respecto a la movilidad y el tráfico en el sector y el destino que se debe dar a preexistencias como el Puente Rojo, entre otras.

La ordenación de este vacío urbano, de especial trascendencia para Alicante, es una tarea pendiente desde la aprobación del Plan General en el año 1987, que delimitó para ello la Operación Integrada 2. Tras varios intentos a lo largo de más de 20 años, al inicio de este mandato finalmente se logró culminar la redacción del plan especial de ordenación estructural del sector OI2, que fue aprobado definitivamente por acuerdo de la Comisión Territorial de Urbanismo de fecha 11 de julio de 2023 y que es el marco normativo que da soporte y al que debe ajustarse el plan especial de ordenación pormenorizada que ahora se pretende llevar a cabo.

Respecto a los usos previstos, el dominante es el residencial, con el terciario y dotacional como usos complementarios. El uso industrial queda prohibido. La edificabilidad total será de 220.000 metros cuadrados, de los cuales se prevé destinar a edificación residencial 171.955 metros cuadrados y están previstas 1.433 viviendas, el 30 % de las cuales serán viviendas sociales. La edificación terciaria prevista es de 48.045 metros cuadrados.