El Principal de Alicante apuesta fuerte por la danza española de la provincia

La danza española adquiere un nuevo nivel gracias al Principal de Alicante. El coliseo alicantino ha presentado un ambicioso proyecto que tiene como objetivo poner en valor el talento dancístico de la provincia con la I Residencia Artística de Danza Española José Espadero. Nada es casualidad y mucho menos el nombre que recibe este proyecto. Si hay una figura local que ha sabido trasladar el espíritu de un municipio a la cultura del baile, ese ha sido él. Y este acto de generosidad forma parte de un reconocimiento a toda su trayectoria profesional.

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Tampoco es casualidad que el Principal de Alicante haya decidido lanzarse en esta aventura, pues es algo que ha llevado muchos años de preparación y que ya se estaba gestando incluso antes de pandemia, según ha anunciado la subdirectora del teatro, María Dolores Padilla, en un evento en el que han participado también José Soriano, director de la compañía de Danza Española: Virginia Sala, maestra repetidora y ayudante de dirección; Eva Arcacia, colaboradora y ayudante de dirección; Ximo Ponce, titular y gerente de la compañía y el mítico bailarían, coreógrafo y docente José Espadero.

Era un día especial donde el Principal mostraba su apuesta directa por introducir nuevas iniciativas que fomentasen la cultura en Alicante y dinamizar la danza española en la ciudad con un proyecto que engloba una vertiente artística, que tiene como fin último elaborar obras ricas en contenido y con un gran esfuerzo de producción, y también una parte pedagógica, que pueda servir a jóvenes bailarines de conservatorios y escuelas privadas a sumar un extra al bagaje y a la experiencia que van adquiriendo en sus centros de formación.

La Residencia, por tanto, no pretende invisibilizar la labor de dichas escuelas, sino aportar un extra que se pueda compenetrar con lo ya aprendido. Y es que contar con el coliseo alicantino para trabajar en la difusión artística de disciplinas como el folclore, el bolero, el flamenco o la danza estilizada no es algo al alcance de todos. En palabras de María Dolores Padilla: “El Principal en estos últimos años ha potenciado sus residencias artísticas, que han crecido de forma exponencial. Creíamos necesario completarlas con esta última para potenciar, dar visibilidad e impulso la danza española alicantina e involucrarnos en el proceso artístico de creación, labor pedagógica y de difusión cultural".

Según los datos que han trasladado, esta primera residencia de danza española tendrá una duración de dos años y la llevará a cabo la Compañía de José Soriano, bailarín, coreógrafo y docente con una dilatada trayectoria profesional, innovador pero respetuoso con la tradición. Para poder crear el equipo que forme parte de este proyecto, se va a desarrollar un proceso de audiciones orientado a alumnos de quinto y sexto de conservatorio, es decir, que estén dando los últimos coletazos de su formación académica, para albergar un número de jóvenes bailarines que ronde entre las 16 y las 20 personas.

Marcándose los plazos, y teniendo en cuenta que es un proyecto de dos años de duración, la compañía estrenará su primer espectáculo Alegoría, coproducido con el Principal de Alicante, el domingo 27 de octubre de este año. Pese a que no han querido dar muchos detalles de esta obra, Soriano ha comentado que va a tratar de "mostrar una carga simbólica fuerte" a través de expresiones artísticas que demuestren "el arte de lo oculto". También ha anunciado que habrá varias sorpresas y que el proyecto "todavía es un esbozo" que se irá desarrollando con el paso del tiempo.

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La promesa de que el espectáculo estará compuesto por 10 o 12 coreografías y que albergará diferentes disciplinas refleja la importancia de la obra. No obstante, además de la función, cuyo vestuario se ha anunciado que estará a cargo de Emilio Morales, también se van a celebrar diferentes clases magistrales, talleres y actividades varias para que cualquier bailarín, dentro o no del proyecto, pueda asistir. "Se trata de un concepto abierto", ha mencionado el gerente de la compañía Ximo Ponce.

El proyecto cuenta con profesionales como Virginia Sala, Eva Arcacia, Fefa Gómez, Rocío Sempere, Lorena Bernal y Alberto Marqués y se ha marcado el objetivo de impulsar el talento de artistas emergentes y consolidados, y de potenciar acciones pedagógicas para ampliar las iniciativas y mejorar la oferta cultural de Alicante. "Y tengo que recordar que la I Residencia Artística de Danza Española está abierta para cualquier talento de la provincia", ha recalcado la subdirectora del coliseo, reivindicando la gran cantidad de conservatorios que hay y su "importante labor" por formar a grandes artistas.

El director de la compañía implicada, José Soriano, también ha comentado que para él "es un honor asumir con máxima responsabilidad y profesionalidad esta nueva etapa de mi compañía de danza, en esta primera Residencia de Danza Española José Espadero que va a posibilitar la visibilidad de la escuela bolera, el folklore, la danza estilizada y el flamenco, y poner en valor el trabajo de que llevamos realizando desde hace más de 17 años en nuestra tierra". Las audiciones van a arrancar ya y anunciarán cómo poder ser parte activa de este proyecto.

Un nombre especial

Un proyecto de danza creado por alicantinos y dirigido a alicantinos no podía tener otros nombre que el de José Espadero. En palabras del maestro, "es un orgullo que esta residencia lleve mi nombre y poder aportar toda mi experiencia a los alumnos. Lo que intentaremos con esta residencia es apoyar la enseñanza que se da en los conservatorios de Alicante y dar a los artistas un espacio emblemático para la difusión como es el Teatro Principal, un edificio histórico que para mí es una parte indiscutible y fundamental de mi trayectoria".

Se trata del bailarín más importante de Danza Española de la historia de Alicante. Con tan solo cuatro años, se subió por primera vez al coliseo alicantino con el seudónimo de Gran Pepito. Un año más tarde, su trayectoria le derivó a pisar la Plaza de Toros y a convertirse en profesional a los catorce años, con su posterior recorrido por España. Sin embargo, si algo hay que poner de relevancia, es su gran labor docente, que llego hasta la mismísima ciudad de Nueva York. Por tanto, esto tiene también un componente de homenaje a una persona que es historia viva de la ciudad. Uno de los mayores exponentes de la cultura y del arte alicantino.