Entrevista | Los Secretos Grupo de música

"Siempre hemos hecho lo que nos gusta sin depender de modas"

La banda realiza un concierto el próximo domingo 17 de marzo en el Benidorm Palace

La formación prepara también un musical que llegará en abril al Principal de Alicante

Los Secretos actuarán este domingo 17 de marzo en el Benidorm Palace

Los Secretos actuarán este domingo 17 de marzo en el Benidorm Palace / información

Juan Fernández

Juan Fernández

Los Secretos es una banda que no se cansa nunca. Pese a estar inmersos en una extensa gira de conciertos con parada en el Benidorm Palace este domingo 17 a las 20 horas, sacan fuerzas para innovar con un musical sobre su carrera interpretado por ellos mismos en teatros. Porque las cosas fáciles no son para ellos y prefieren arriesgar con propuestas innovadoras.

Su llegada a Benidorm tiene la etiqueta de concierto a la vieja usanza, solos contra el peligro. Pero el próximo mes, concretamente el martes 9 y el miércoles 10 de abril, visitan el Teatro Principal de Alicante con A tu lado, un musical que hace un repaso por toda su carrera lleno de luces y sombras. Por ello, hablamos con Álvaro Urquijo, cantante, guitarrista y líder de la banda.

¿Cómo surgió la idea de llevar vuestras canciones a la teatralización?

Nosotros vivíamos muy cómodamente haciendo nuestro repertorio, grabando discos cada equis tiempo... Pero la sensación era de que estábamos en una zona de confort demasiado cómoda. Sin hacer prácticamente nada, teníamos trabajo. Y ya llevamos tiempo arriesgando en hacer cosas diferentes. En 2003, por ejemplo, hicimos un concierto con una sección de cuerda que nos encantó. Luego, hicimos varios temas con arreglos orquestales y en 2012 grabamos un disco con la Joven Orquesta de la Universidad de Valladolid en el Teatro Real de Madrid. Salir de tu acomodo para experimentar cosas nuevas es algo que llena de orgullo y el público lo acaba apreciando.

Pero un musical sobre vuestra trayectoria son palabras mayores.

Por suerte o por desgracia, nosotros tenemos una historia que contar. Hay un hilo de esfuerzo y de superación que no es normal. Quizás otra gente hubiera tirado la toalla. Empezamos con el fallecimiento de un amigo, Canito, batería y compositor de la banda, en un accidente de coche que nos dejó descolocados. A los cuatro años, nuestro segundo batería, Pedro, también fallece en otro accidente de coche. Esa resiliencia, esa forma de superar los problemas gracias a la música y al público que estaba al otro lado, hicieron que siguiéramos adelante. Entonces, sumergido en plena pandemia, y viendo que un gran número de personas fallecía cada día, me pregunté: "¿Qué pasa si fallezco yo? ¿Quién va a contar nuestra historia?" Ahí fue cuando escribí un libro recopilando recuerdos que tuvo mucha difusión, un proyecto que no se podía descargar de ninguna plataforma. Y el interés despertado provocó que la productora nos plantease hacer un musical.

Un musical en el que los protagonistas son ustedes mismos.

Ellos en un principio eran reacios porque decían que ningún musical de un grupo en activo había funcionado, que la idea era coger esa historia y transportarla a un musical estándar con actores jóvenes que interpretaran papeles. Una historia que no tenía por qué ser la relacionada con nuestra vida. No había antecedentes de que un grupo hubiera hecho un musical formando parte de él. Es un paso que nadie ha dado y no sé qué le parecerá a la gente, pero creo que el grupo está a la altura de poder hacer este tipo de cosas. ¿Quién mejor que los secretos para contar su propia historia?

¿Pese a que, a priori, no sea vuestro terreno?

Todavía estamos en condiciones físicas y mentales de hacerlo bien. Este proyecto ha resultado mucho más gratificante de lo que yo hubiera imaginado nunca. Fíjate, llevando 45 años a las espaldas de escenarios y conciertos, te ves en una cosa que no pertenece a tu terreno y regresa esa sensación de pánico escénico. Eso hace que salgas completamente de tu zona de confort y vuelvas a sentir la adrenalina de los comienzos.

Y el público agradece estas nuevas aventuras.

Ningún grupo ni solista tiene futuro si el público no lo acompaña. Nosotros, en los momentos más duros de nuestra carrera, cuando fallecen compañeros, hermanos y amigos, y nos ningunean echándonos de discográficas y no sonando ni en radio ni en tele, siempre hemos tenido a la gente detrás. Nos hemos dado cuenta de que nuestras canciones son transgeneracionales y los padres han pasado a sus hijos su fanatismo por nuestras canciones. Los Secretos hemos tenido que devolver al público con buenos conciertos y nuevas ideas todo el cariño que estábamos recibiendo.

Siempre saca pecho de que el éxito conseguido se ha llevado a cabo sin seguir modas.

Que tengas muchos likes no hace que tu música sea de calidad. Nosotros no hemos cambiado mucho durante estos años y hemos tenido que pasar momentos muy duros precisamente por fiarnos de nuestro criterio, es decir, por querer hacer lo que nos gusta sin apuntarnos a las modas o a las tendencias. En el 95 sacamos el disco Dos caras distintas que fue un fracaso por la brutal competencia que había. Era de nuestros mejores discos, pero teníamos que competir con Radio Futura o Sabina, por lo que no tuvo mucha repercusión y lo dejamos como un fallo que tendríamos que subsanar con nuestro próximo trabajo. Pues nuestra intuición no nos mentía y dentro de ese disco se encontraba la canción Pero a tu lado, que a día de hoy es nuestro número uno.

Es una canción que sigue sonando a día de hoy.

Afortunadamente, gracias a la casualidad, tenemos la suerte de que nuestras canciones han recibido una respuesta muy importante por un público incondicional que nos ha permitido seguir trabajando en esto. Como está la cosa ahora, si Los Secretos hubiéramos nacido a día de hoy, pasaríamos desapercibidos. En los ochenta, las televisiones y las radios eran un gran escaparate para la música nacional. Eran un foco de cultura musical y de proyección para los grupos. Si sacabas un disco nuevo, salías en la tele y en la radio. Ahora ha cambiado ese paradigma con las redes sociales y con las nuevas plataformas.

¿Actualmente es más difícil hacer canciones que perduren en el tiempo?

Puede ser que sí. El alto ritmo de las canciones lo han impuesto plataformas como Instagram o TikTok. Escucho un tema que se ha puesto de moda y veo que en los primeros 30 segundos ya sale todo. No hay introducción, no hay solos de guitarra, no hay riffs... Empieza con un estribillo, una estrofa y luego repiten el ciclo tres veces y adiós. Las canciones antes duraban lo que duraban porque las compañías de discos estaban hechas por gente que amaba la música. Canciones como Hotel California o Hey Jude tienen ese componente de sorpresa hasta el final. El concepto de monetización inmediata y de popularización ha comprimido todo el talento, pero, por mi parte, tengo que respetar algo que es inevitable. Igual que mi padre no entendía que escucháramos a los Clash, por ejemplo, nosotros tenemos que entender que todo cambia.