Análisis

Las dos victorias de Leo Climent

Leo Climent acaba con su rival en menos de 1 minuto en el WAR MMA celebrado en la Plaza de Toros de Alicante

Rafa Arjones

Nicolás Cabot

Nicolás Cabot

Semana grande para las artes marciales mixtas en España. Alicante acogió en su Plaza de Toros la segunda edición de “WAR MMA”, un evento plagado de promesas en el que un luchador brilló por encima del resto: el alicantino Leo Climent. La velada llegaba precedida de historia. El pasado marzo, Leo Climent entró en una zona oscura. Debutó con la promotora “WOW” en Sevilla, en un Cartuja Center Cite que colgó el cartel de “sold out” para una velada que acogió a casi 3000 espectadores. Sobre Leo, convertido pese a su juventud en un luchador mediático merced a una electrizante actividad en redes, se descargaba un peso difícil de soportar en el mundo de las artes marciales mixtas: la expectación.

Su rival era Pablo Colado, un luchador de 24 años, más experimentado, que se subía al octágono con el apoyo mayoritario del público. Sobre la lona de Sevilla se vio una pelea cerrada, que generó disparidad de opiniones, pero los jueces dieron ganador en las tarjetas al luchador de Chiclana.

En ese momento, tras esa derrota, empezó el verdadero combate de Leo Climent. La expectación creada sobre su prometedor futuro se tornó en aceradas críticas, continuadas y repetidas en cada vídeo, publicación, podcast o noticia con su nombre en el centro. Una carga psicológica enorme para un joven de 18 años que lucha por el sueño de convertirse en campeón del mundo y en una figura importante y respetada dentro del deporte.

Leo Climent tras ganar su combate

Leo Climent tras ganar su combate / Rafa Arjones

Este último sábado, en su tierra, frente a su gente, tras meses de críticas y dudas, Leo consiguió su redención. En la velada “WAR MMA” encabezada por Franco Tenaglia, quien venía de ser campeón de Europa de la disciplina “Bare Knuckle”, Leo se subió al ring frente a Pablo Balderas y solo le bastaron 30 segundos para poner en pie a una plaza de toros abarrotada, vibrante al comprobar el boxeo trabajado y preciso del alicantino, fruto de la labor con el entrenador de boxeo de Topuria, Javi Climent. Leo mandó a la lona a Balderas con un croché de izquierda que arrastraba consigo en su certera trayectoria todas las críticas sufridas en los últimos meses, silenciadas después de un golpe que se llevó el bono al “KO de la noche”.

La velada de Alicante plasmó una nueva versión mejorada de un Leo Climent que tendrá que seguir demostrando por qué es uno de las mayores esperanzas de las artes marciales mixtas en España.

Así, un renacido Leo puso el broche de oro a una espectacular velada en la que no solo le ganó a Pablo Balderas, también a su propia cabeza.