La restauración y la cesta de la compra concentran el aumento del gasto de las familias alicantinas

El presupuesto destinado a la hostelería se lleva 752 euros más que el año anterior y el de alimentación, otros 448 euros

La proximidad se impone al precio en la cesta de la compra de los consumidores de los mercados de Alicante

Pilar Cortés

David Navarro

David Navarro

Las familias alicantinas cada vez destinan más dinero a comer, tanto dentro como fuera de casa, hasta el punto de que la restauración y las compras de alimentación en tiendas y supermercados concentraron durante el año pasado dos tercios de todo el aumento de gasto que registraron los hogares de la autonomía.

Así lo revelan los últimos datos de la Encuesta de Presupuestos Familiares que elabora anualmente el Instituto Nacional de Estadística (INE), que supone uno de los indicadores más fiables sobre la evolución de las pautas de consumo.

En términos generales, el primer dato que destaca es que el gasto medio por hogar aumentó durante el año pasado un 6% en la Comunidad Valenciana, hasta situarse en 31.765 euros, lo que representa el máximo de la serie histórica que ofrece el organismo. Eso sí, sigue por debajo de la media nacional, que alcanzó los 32.616 euros, y bastante alejado de las autonomías donde este importe es mayor, como Baleares, donde se situó en 39.081 euros, o Madrid, con 37.360 euros.

De esta cifra total, casi un tercio se dedicó a los gastos relacionados con la vivienda, que se llevaron hasta 9.509 euros del presupuesto de las familias de la autonomía. Pese a lo abultado del número, lo cierto es que solo es un 1,3% más que en 2022, ya que el fuerte aumento de los alquileres se compensó en parte con el abaratamiento de la electricidad y los combustibles para calefacción.

La segunda partida en importancia fue la compra de alimentación y bebidas que, en este caso, sí experimentó un incremento considerable, de más de un 10% con respecto al año anterior, como consecuencia de la fuerte subida de precios. En total, los hogares de Alicante, Castellón y Valenciana tuvieran que destinar en 2023 hasta 5.158 euros a llenar la nevera, 448 euros más que en el ejercicio anterior.

Sin embargo, el incremento más llamativo es el que registra el apartado de restaurantes y hoteles, que se disparó un 28%, hasta sumar una media de 3.529 euros anuales por familia, es decir, 752 euros más que en 2022. Se trata de una subida de más del doble que la media nacional, ya que en el conjunto del país el gasto de los hogares en restauración también aumentó, aunque "solo" un 13%.

Una de las terrazas del puerto de Alicante.

Una de las terrazas del puerto de Alicante. / Jose Navarro

La presidenta de la Asociación Provincial de Empresarios Hostelería de Alicante (Aphea), María del Mar Valera, no duda en vincular este incremento del peso del sector en los presupuestos familiares al aumento de la vida social que se ha producido tras la pandemia. "Ahora la gente prefiere salir más, antes que gastarse el dinero en otras cosas", asegura la portavoz de los hosteleros alicantinos, que reconoce el buen momento que atraviesa el sector, como prueba la constante apertura de nuevos locales.

Sin embargo, para el presidente de la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (Avacu), Fernando Móner, el principal motivo de que las familias gasten más en bares y restaurantes está en la fuerte subida que han experimentado los precios. Y no sólo como consecuencia de la inflación de los productos agroalimentarios. "La mayor llegada de turistas internacionales, con un poder adquisitivo superior, ha provocado que muchos locales adapten sus precios a este tipo de público. La sensación es que todo es bastante más caro", apunta Móner. Una situación que, según afirma, también se nota en las tarifas que cobran los hoteles, otro de los componentes de este apartado.

Una afirmación que, sin embargo, la presidenta de Apeha rechaza y asegura que la mayoría de establecimientos únicamente ha incrementado sus precios el mínimo necesario para repercutir la subida de costes que han sufrido.

Junto con los anteriores, otros apartados que suben son la enseñanza, a la que las familias de la zona destinan una media de 474 euros, un 17,2% más que en 2022; o el mobiliario y los artículos para el hogar, que suman 1.411 euros, un 14,5% más.

Bajadas

En el otro extremo, entre las partidas que experimentan las subidas más moderadas destacan la ropa y el calzado, al que el año pasado solo se destinó un 3,6% más de presupuesto, hasta sumar 1.280 euros por hogar; o el transporte, que apenas sumó un 0,1%, hasta los 3.610 euros por familia.

Por último, los hogares de la Comunidad Valenciana únicamente consiguieron ahorrar en dos partidas. Por un lado, en comunicaciones, un apartado al que destinaron una media de 810 euros, un 0,7% menos que el año anterior; y, por otro, la Sanidad, que supuso un dispendio de 1.323 euros por familia, un 5,6% menos, según el INE.