Vertederos de norte a sur en Elche

Enseres de todo tipo, desde sofás, televisiones, sillas, lavabos, armarios, hasta restos de obra. Casi todo lo necesario para hacerse una casa puede encontrarse estos días en los caminos rurales de Elche. También hay sacas con restos de poda, botellas de lejía, hasta viejas colchonetas de playa. Incluso neumáticos han sido detectados por la Concejalía de Limpieza. La variedad de las basuras y desperdicios que se encuentran en las pedanías parece no tener límite. Da igual que existan contenedores al lado o que haya carteles que adviertan de que está prohibido, bajo sanción, verter cualquier tipo de residuo no doméstico.

Da igual que haya puntos limpios específicos para deshacerse de todo lo que no se puede tirar a los depósitos de basura o que haya recogida de poda gratuita a la puerta de casa. Hay quienes obvian las normas y se desprenden sin vergüenza de todo lo que consideran. El éxodo de vecinos de la ciudad al campo ha acabado generando verano tras verano este problema histórico en las pedanías más pobladas y en las carreteras y caminos más frecuentados que son los que suelen conectar con las playas.

Esta estampa también lleva años coincidiendo con el auge de las reformas, especialmente, en las casas de campo que desde que estallara la pandemia están arrasando. Y de todo ello son testigos vecinos que con indignación y frustración ven cómo se deteriora la imagen de un paisaje único y singular por muchas medidas que se anuncien por parte del Ayuntamiento.

Más de cien escombreras improvisadas fueron identificadas hace ya tres años en el municipio tras el trabajo conjunto por parte de la Policía Local y de Limpieza.

Sin embargo, el gran escollo es encontrar al infractor en plena acción.

Suscríbete para seguir leyendo