SUCESOS

El propietario de un chalé en Elche sufre dos intentos de asalto por encapuchados en 38 días

El último intento de robo ocurrió este martes en la urbanización Don Balbino y las alarmas pusieron en fuga a los ladrones, que habían saltado la valla de acceso y llegaron colocarse cara a cara con el dueño, separados solo por una puerta de cristal del porche

Dos de los encapuchados observan al propietario del chalé en el interior del mismo

M. Alarcón

M. Alarcón

M. Alarcón

Un empresario de Elche, residente en la urbanización Don Balbino, en las inmediaciones de la partida de Peña Las Águilas, muy cerca de la carretera de Crevillent, miró anoche cara a cara a dos de los encapuchados que intentaban entrar a su chalé. Solo les separaba el cristal del porche, perfectamente cerrado. La alarma perimetral de la finca estaba sonando con fuerza, pero los asaltantes, uno de los cuales iba armado con un cuchillo, ni se inmutaban, como se observa en las imágenes. De forma casi parsimoniosa se dieron la vuelta y salieron de la finca saltando de nuevo la valla. Sin prisas.

El empresario aseguró que hay querido denunciar lo ocurrido para intentar lograr mayor seguridad y que nadie más pase por lo que tuvo que pasar él y sus familiares, lo que requiere de una vigilancia que no existe en muchas zonas del Camp d'Elx, afirma.

El empresario, con un cuchillo de cocina, se asoma a una ventana y mira a los encapuchados

El empresario, con un cuchillo de cocina, se asoma a una ventana y mira a los encapuchados / INFORMACIÓN

Ventanas

No es la primera vez que ha sido asaltado, ya son cuatro y la segunda con miembros de su familia en el interior de la finca, algo que debían conocer porque había luces y no les importó. Eran sobre las 22.30 horas, asegura, una hora nocturna relativamente temprana en la que, de haber hecho algo de calor, hubieran tenido abiertas las ventanas del porche. Afortunadamente, para él, no fue así. Explica que todos iban vestidos de negro y llevaban pasamontañas. Sabían que no iban a poder reconocerles.

El hombre llega a coger un cuchillo de la cocina buscando algo con qué defenderse de los asaltantes, según se observa a través de una cámara de seguridad instalada dentro de su propia vivienda. "¡Hay gente!", se le oye gritar cuando se asoma por la venta y observa en el exterior de la casa a varias personas. "¡No abras, no abras!", grita un familiar asustado que entra y sale por la escena con gran rapidez. El sonido sordo de la alarma lo inunda todo.

Cuando logró avisar al 091 y 092 y llegaron los vehículos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, los ladrones estaban ya muy lejos, la proximidad de la urbanización con la carretera a Crevillent y también la autovía hicieron el resto. Probablemente, escaparon en un vehículo previamente robado de gran cilindrada, la Comisaría de Elche lo está investigando.

Dos encapuchados, en el exterior del chalé de la urbanización Don Balbino, en Elche

Dos encapuchados, en el exterior del chalé de la urbanización Don Balbino, en Elche / INFORMACIÓN

"No pude verle las caras"

El empresario no ha tenido problema en contar lo ocurrido a INFORMACIÓN. "No pude verles las caras, pero alguien tiene que hacer algo y evitar que vuelva a pasar. Son ya cuatro veces desde que compré el chalé, hace un año y medio. La última, la noche del 19 al 20 de abril". El denunciante asegura que cuenta con alarma exterior -perimetral- y otra en el interior de la vivienda.

La primera alarma se activó unos segundos después de que los asaltantes hubieran saltado por la valla. Pero supuestamente no les dio tiempo a romper los cristales y acceder. Las luces en el interior del chalé no parece que les intimidaran lo más mínimo, como tampoco el estridente sonido de la alarma ni saberse que estaban siendo grabados con toda seguridad.

Vehículos de la Policía, a su llegada anoche al chalé de la urbanización Don Balbino, en Elche

Vehículos de la Policía, a su llegada anoche al chalé de la urbanización Don Balbino, en Elche / INFORMACIÓN

"Pillarnos con la guardia baja"

El propietario del chalé, que atiende a las iniciales J. M., asegura que "lo preocupante es que las dos últimas veces lo han hecho con gente dentro, lo que me hace pensar que están intentando pillarnos con la guardia baja para poder entrar dentro y retenernos. Anoche, suerte que la alarma estaba puesta pese a ser pronto, entraron cuatro y uno de ellos iba armado. Al sonar la alarma y verlos de frente (yo dentro, ellos fuera) se fueron caminando. ¡Caminando! Me armé, esperé prudentemente dos minutos (eternos) y salí con el coche para ver si podía seguirlos para averiguar quiénes pueden ser que tanto insisten en entrar en mi casa… Al final nada, un susto y la sensación de que volverán. En esto se está convirtiendo #España".

Una imagen tomada de la pierna de uno de los asaltantes al chalé de Elche, donde se observa una de las zapatillas

Una imagen tomada de la pierna de uno de los asaltantes al chalé de Elche, donde se observa una de las zapatillas / INFORMACIÓN

Vivienda violentada

El empresario espera que su denuncia pública, después de cuatro asaltos, tengo una respuesta por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que no sea tan tibia como las tres anteriores en las que ha sido violentada su vivienda. Según aseguró, en una de las primeras ocasiones los ladrones se apoderaron de una importante cantidad de dinero pues es una persona conocida. "Saben a dónde vienen y pueden que no estuvieran vigilando", afirma sin dudar.

Añade que a la urbanización se accede por una única entrada y salida, "con un par de simples cámaras de vigilancia instaladas en la vía pública la Policía tendría controlado quién entra y sale a la urbanización". Uno de los ladrones lleva una zapatilla de una conocida marca que es la única pista que tiene para su identificación, imagen que facilitó a la Policía Nacional.