Novelda deja el cierre temporal del mercado en manos de la empresa que hará la reforma

Los vendedores aseguran que no se les ha comunicado un lugar provisional para montar sus puestos mientras el edificio esté en obras

Los trabajos está previsto que empiecen antes de verano y terminen a finales de año, según el Ayuntamiento

Un puesto de aceitunas del mercado municipal de abastos de Novelda.

Un puesto de aceitunas del mercado municipal de abastos de Novelda. / Áxel Álvarez

El Ayuntamiento de Novelda deja el cierre temporal del mercado municipal de abastos en manos de la empresa que hará la reforma. El pliego de obras para la mejora y rehabilitación del edificio contempla las opciones de cierre total, parcial o la combinación de ambos. Esto implica que la empresa adjudicataria de las obras decidirá si el mercado permanece cerrado mientras se realizan las actuaciones o si puede permanecer abierto simultáneamente, aunque desde la concejalía de Mercados ya avanzan que se tendrá que cerrar durante algunas fases.

Esta situación ha llevado a los comerciantes a preguntarse qué sucederá con sus puestos cuando el mercado eche la persiana por las obras, que el Ayuntamiento prevé que comiencen antes del verano y estén finalizadas hacia finales del presente ejercicio.

La presidenta del mercado municipal de abastos de Novelda, Paqui Campos, ha explicado: "Llevamos dos años conociendo la situación de la reforma del mercado. Primero nos dijeron que sería un cierre parcial, pero luego nos informaron que no sería viable".

Los propios comerciantes consultaron a un experto en mercados para explorar opciones ante el cierre del suyo. "Nos sugirió la posibilidad de establecer un mercado provisional en la calle María Cristina. Tras comunicarlo al Ayuntamiento, nos informaron que sería demasiado costoso. Luego nos propusieron la opción del edificio de la cooperativa, pero nadie ha avanzado con ello. Nos enteramos de todo por los medios de comunicación. El alcalde me dijo que se iría viendo cómo evolucionaba la situación", señala la presidenta.

El edificio de la cooperativa cuenta con carteles de "se vende" y "se alquila".

El edificio de la cooperativa cuenta con carteles de "se vende" y "se alquila". / Áxel Álvarez

Begoña Andreu regenta un puesto de frutas y verduras desde hace 29 años. Su posición es clara: "Tenemos que pagar los impuestos y no podemos dejar ni un día de trabajar por todos los gastos que tenemos. Antes de solicitar las reformas primero tienen que pensar en los comerciantes y las familias. Da igual donde nos lleven, pero necesitamos un sitio".

En esta línea Andreu recuerda que "es el peor momento con dos guerras y los alimentos tan caros para ponerse a hacer reformas. Sabemos que es necesaria, pero no podemos dejar de trabajar. Si salimos de aquí no volveré a abrir el puesto. Se quedará el mercado nuevo, pero sin comerciantes".

Por su parte, Ximo Parreño, quien tiene un puesto de aceitunas, revela que "hace seis meses nos prometieron un mercado provisional en una ubicación que ellos propusieron. En las reuniones preguntamos por el precio de la alternativa y nos ignoraban, nos decían que no era relevante para nosotros".

Los placeros indican que los clientes les muestran su apoyo en el día a día ante esta situación de incertidumbre. "Viene mucha gente preguntándonos dónde vamos a ir. Si nos ubicamos en otro sitio, podemos hacer frente a la situación y luchar".

Margarita Calatayud es una habitual en el mercado de Novelda: "Me parece fatal que les cierren sin buscarles un sitio. Lo tengo cerca de mi casa y hago la compra aquí. Les he propuesto que vendan a domicilio". A su lado se encuentra Elisabeth Belda, también usuaria del mercado. "Viene mucha gente del pueblo a comprar aquí, aunque viene más gente mayor que joven".

Vicente Monge, de un puesto de verdura sostiene que "nos han engañado, hasta hace cuatro días nos dijeron que había un sitio provisional. Han ido con mentiras y verdades a medias. No se puede cerrar la actividad así como así".

Respuesta municipal

El concejal de Mercado, Santiago Sánchez, sostiene que un principio se buscó un sitio provisional, como fue la cooperativa. No obstante, asegura que el Ayuntamiento contaba con 400.000 euros de presupuesto, por lo que acceder a este edificio con la ventilación, el saneamiento y las cámaras frigoríficas correspondientes para adaptarlo como mercado provisional suponía un gasto de al menos un millón y medio. "Este plan se desmonta porque no tenemos capital", confirma Sánchez.

"Sabemos que esta situación no es cómoda para los comerciantes, pero puede darse el caso de que se tenga que cerrar", afirma el edil. Así las cosas, el responsable del área recuerda que, por el momento, el proyecto de reforma se ha sacado a concurso público y que una vez haya una empresa adjudicada, esta decidirá cómo proceder.