City, beach and noise

Turistas se fotografían en el castillo de Santa Bárbara, en una imagen reciente, con un crucero al fondo.

Turistas se fotografían en el castillo de Santa Bárbara, en una imagen reciente, con un crucero al fondo. / Alex Domínguez

Juan Carlos Cortés Lamas

Pocos titulares me asombran más que los ocurren en nuestra ciudad: el cobro de una entrada (tasa) para visitar el Castillo de Santa Bárbara para la gente que ‘no es de Alicante’ (turistas) y ahora, masificaciones de gente (turistas ‘one more time’), en el barrio de Santa Cruz que perturban el descanso de los vecinos, ante lo cual, el ayuntamiento lejos de ponerle coto, opta por un código de buenas prácticas para los operadores turísticos.

La realidad nos está dando en la cara: en cuanto llega elsun and beach time’, la ‘city’ se vuelve ingobernable. Oleadas de turistas llegan a nuestra ciudad con la intención de disfrutar de la ‘beach’, coger colorete al ‘sun’ y hacer un montón de ‘noise’, ¿pero a qué coste?

Hay margen de crecimiento, se afirma, y que además esto repercute positivamente en la ciudad. Matización: repercute positivamente a los bares y hoteles, no en la ciudadanía.

Hablamos de falta de financiación, y pudiendo paliarlo, se opta por tragar. Nos enorgullecemos de nuestro ‘sun and beach’ pero nos avergüenza pedir una contribución por ello. En Roma, Londres e Ibiza lo hacen. Nosotros no.

Se necesita acción. Medidas específicas para evitar este ‘noise’ que ocurre todos los veranos y que cada vez, va a más. ¿No estamos pidiendo una ampliación para nuestro aeropuerto? ¿No mendigamos esos megacruceros que han rechazado en Valencia?

Una tasa turística, un mayor control. Medidas ya, las que sean. ‘Sun and beach’ si, pero moderemos ya el ‘noise’.