El PSOE de Alicante salta por los aires: Barceló reclama la dimisión de Millana

La portavoz municipal exige la salida del secretario local después de que le reprochara su actitud en la ejecutiva mientras el PSPV de Morant guarda silencio. El secretario provincial, Alejandro Soler, también evita pronunciarse aún sobre el conflicto

El penúltimo rifirrafe en el PSOE de Alicante entre Ana Barceló y Ángel Franco: "Ya tienes tu foto" - "No tienes ni puta idea he venido a tomar un café"

Rafa Arjones

Borja Campoy

Borja Campoy

La tensa ejecutiva que vivió el PSOE de Alicante en la noche del martes ha tenido consecuencias inmediatas, provocando que la relación entre la agrupación local, que controla Ángel Franco, y el grupo municipal, que encabeza Ana Barceló, estalle por completo, mientras tanto el PSPV de Diana Morant como el secretario provincial, Alejandro Soler, guardan silencio al respecto. La portavoz municipal exigió este miércoles, a través de un comunicado, la dimisión del secretario local en Alicante, Miguel Millana, después de las declaraciones del propio Millana a este diario a la conclusión de la ejecutiva. «Barceló ha mostrado unas ínfulas que no vienen a cuento. Me sorprende su actitud de baja estofa», dijo el secretario local sobre la portavoz municipal.

En el comunicado remitido por Barceló este miércoles, en el que acusa a Franco, sin citarlo, de tener secuestrado al partido del puño y la rosa en Alicante, se pide la dimisión formal de Millana «por sus declaraciones desafortunadas y comportamiento impropio de alguien que ostenta su cargo». La exconsellera considera que «una agrupación como la de Alicante no puede permitir que el pensamiento único se imponga», en una de las principales acusaciones que lanza contra Franco por el control que ejerce sobre el partido.

Como lleva tiempo reclamando, Barceló insta a la necesidad de «un partido fuerte y unido que recoja diferentes miradas de los militantes que lo componen». Para que este escenario que plantea sea posible, la portavoz municipal considera que Millana debe «dar un paso atrás y permitir que se inicie un nuevo proyecto que no solo responda a un mandato único». A continuación, la que fuera presidenta del PSPV apela a que se comience «a trabajar desde el respeto, la unión y la pluralidad para reconstruir un partido que realmente sea el reflejo de las personas» a las que representa.

Barceló insiste en el control que ejerce Franco sobre el PSOE alicantino, ya que sigue afirmando que los objetivos de los socialistas no se podrán alcanzar «mientras sea una única mirada la que se impone y decide el camino a seguir sin escuchar a quienes forman parte del proyecto». En el escrito en el que reclama la dimisión de Millana la portavoz municipal finaliza afirmando que «en política no vale todo» y que «el partido en la ciudad de Alicante cuenta con muchas personas que sólo necesitan la oportunidad de empezar a trabajar en un proyecto integrador y de futuro».

Reunión bronca

La última crisis hasta la fecha en el PSOE de Alicante, que ha desembocado en que Barceló pida la cabeza de Millana, se ha producido después de la ejecutiva que los socialistas celebraron en la tarde del martes, una larga reunión que rozó las tres horas y que destacó por su tono bronco. El encuentro comenzó con el análisis de los resultados de las elecciones europeas, cerca de un mes después de su celebración, y derivó en una discusión contante en la que se reprochó a los responsables de la agrupación alicantina cuestiones como la opacidad con los recursos económicos del partido o el uso que se hace de las redes sociales, en las que se ningunea la actividad que lleva a cabo el grupo municipal.

El mayor conflicto se produjo cuando desde la agrupación se planteó establecer una hoja de ruta para las elecciones municipales de 2027, en un debate a viva voz que ni estaba previsto ni sustentado en ningún documento. Los representantes de los sectores críticos con Franco se negaron a mantener este debate.

Tras la reunión de la ejecutiva Millana reprochó a Barceló, en declaraciones a este diario, la actitud que había mostrado, lo que llevó este miércoles a la portavoz municipal a pedir su dimisión. Al conocer la intención de la portavoz municipal, Millana acusó a la exconsellera de estar haciendo «oposición al PSOE en vez de al gobierno de Luis Barcala», de seguir «con la intención de reventar al partido desde dentro tras haber fracasado en las elecciones del año pasado» y de comportarte como «un gallito que busca pelea».

Este es el comunicado íntegro de Ana Barceló:

Tras las declaraciones del secretario general de la agrupación de Alicante, Miguel Millana, recogidas en INFORMACIÓN:

Como portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Alicante, pero sobre todo como militante de este partido durante 22 años, quiero pedir formalmente la dimisión del secretario general de la agrupación de Alicante, Miguel Millana, por sus declaraciones desafortunadas y comportamiento impropio de alguien que ostenta su cargo.

Una agrupación como la de Alicante no puede permitir que el pensamiento único se imponga y se conviertan en costumbre las faltas de respeto a quién piensa diferente. 

Alguien que, como consecuencia de una decisión meditada, decide insultar públicamente a una compañera de partido, no puede ostentar el cargo de secretario general. No en un partido que siempre ha defendido la pluralidad en todos los aspectos.

La ciudad de Alicante necesita un partido fuerte y unido que recoja las diferentes miradas de los militantes que lo componen. Un partido plural que permita disentir y aportar, siempre desde el respeto. En definitiva, un reflejo de la sociedad.

Para que eso suceda, es necesario que el secretario general decida dar un paso atrás y permitir que se inicie un nuevo proyecto que no solo responda a un mandato único. Necesitamos crear una nueva mayoría para crecer como partido y para estar a la altura de lo que una ciudad como Alicante necesita.

Es preciso comenzar a trabajar desde el respeto, la unión y la pluralidad para reconstruir un partido que realmente sea el reflejo de las personas a las que representamos. No podremos conseguirlo mientras sea una única mirada la que se impone y decide el camino a seguir sin escuchar a quienes forman parte del proyecto.

Después de una vida dedicada, en gran parte, al servicio público y la defensa de los ideales socialistas, no podría seguir ejerciendo mis obligaciones con la dignidad necesaria si no evidenciase que en política no todo vale y que en ocasiones es necesario decir basta.

El partido en la ciudad de Alicante cuenta con muchas personas que sólo necesitan la oportunidad de empezar a trabajar en un proyecto integrador y de futuro. Ese momento, ha llegado.