¿Son pasajeros los amores de Hogueras (y de verano)? La ciencia tiene la respuesta

Según expertos psicólogos, la intensidad de los amores estivales tiene base científica

¿Son pasajeros los amores de Hogueras (y de verano)? La ciencia tiene la respuesta

¿Son pasajeros los amores de Hogueras (y de verano)? La ciencia tiene la respuesta

Javier Corazón

Javier Corazón

Cuando llegan las Hogueras y, con ellas, el solsticio de verano y el cuerpo parece estar predispuesto a conocer a más gente, a la fiesta, el descanso y los planes erótico-festivos. ¿Te ha pasado lo de conocer a un amor de Hogueras o de verano y que se mustie como una planta con la llegada del inveirno? Este hecho no es casualidad: es ciencia. Tanto el “subidón” del principio de las relaciones veraniegas como el declive de las mismas una vez llegado el invierno tiene su explicación científica. ¿Quieres saber si durará tu amor de verano o debes ir preparándote para el luto en septiembre? Sigue leyendo porque no todo está perdido.

Según expertos psicólogos, los amores de verano suslen ser intensos por varias razones. El contexto de vacaciones, la relajación, la falta de obligaciones y los numerosos momentos de ocio y aire libre predisponen a vivir cualquier experiencia de manera más intensa. En este entorno, estamos más receptivos a nuevas experiencias y a conocer gente, lo que nos lleva a fijarnos en otras personas y dejarnos llevar. Así es: tenemos el tiempo y las ganas (propiciadas por el descanso) que necesitamos para que nuestro cuerpo pida salsa.

Y es que el estado de relajación que experimentamos en verano también juega un papel crucial en estos romances. Según especialistas, disfrutar del presente sin preocuparnos por lo que tenemos que hacer y vivir sin un horario lleno de obligaciones nos lleva a un estado de relajación que es crucial para establecer una buena conexión con los demás. Esto nos permite sentir las emociones con mayor intensidad y sin interferencias. Os dedicáis tiempo, espacio y ganas... y se nota.

Las hormonas juegan un papel fundamental llegada la época estival.

Las hormonas juegan un papel fundamental llegada la época estival. / Pixabay

Ojo a las hormonas

Otro aspecto importante es el hormonal. Durante las vacaciones, segregamos más dopamina y endorfinas, lo que nos predispone a la actividad y al buen ánimo (y sí, de nuevo a las ganas de...). Esto se debe, entre otras cosas, a la reducción del estrés, a la realización de más actividades físicas y a las mayores horas de luz, que en Alicante son muy importantes, ya que se encuentra en el top 3 de las ciudades con más luz al año de toda Europa.

¿Son caducos los amores de verano?

Es cierto que muchas veces, estos romances están destinados a ser efímeros y tienen una fecha de fin. Los psicólogos inciden en que el estado de enamoramiento es temporal y, si no se cuida o alimenta el vínculo, es difícil que la relación se mantenga en el tiempo. Además, la distancia física, cuando la otra persona es de otra ciudad o país, es un factor importante que impide el vínculo. La realidad de los horarios, rutinas y obligaciones también puede dificultar que se mantenga el mismo estado de calma que al conocerse, complicando la transición del enamoramiento al amor más estable en el que, si bien la intensidad por el “shock” del principio disminuye, se debe mantener y cuidar la conexión sexual y comunicativa.

Así que no, no todo está perdido si has conocido a tu pareja en verano ya que, ante todo, lo esencial es seguir alimentando el vínculo dedicándole cariño, tiempo de calma, metas en común e ilusiones para compartir a lo largo de la vida. Si esto último no se tiene, ya sea un amor de verano o de invierno, es muy difícil que el vínculo no se marchite. Así que recuerda: ¡riega cada día tu amor de verano y durará para siempre!