Conoce al que es uno de los animales más temidos del verano en Alicante

Para muchos son una auténtica película de terror y es muy probable que alguna vez te hayas tenido que "enfrentar" a una, sobre todo en verano. Las escolopendras, comúnmente conocidas como ciempiés gigantes, son una presencia notable en la región mediterránea, incluyendo la provincia de la provincia de Alicante. La especie más frecuente en esta área es la Scolopendra cingulata, también conocida como la escolopendra mediterránea y, si tienes dudas o miedo desmesurado ante la presencia de este animal, ahí van algunos datos que te pueden ayudar a conocerlo.

Impresionante avistamiento de un animal cada vez menos común en Alicante

Aunque estas criaturas pueden parecer intimidantes debido a su tamaño y apariencia, es esencial entender su comportamiento, hábitat y peligrosidad para coexistir de manera segura con ellas. En Alicante, las escolopendras son más visibles durante las estaciones cálidas y aunque sus picaduras pueden ser de las más dolorosas, rara vez son letales para los humanos sin que exista algún tipo de alergia.

Características y Apariencia

Las escolopendras son artrópodos pertenecientes al género Scolopendra dentro de la clase Chilopoda. Se caracterizan por tener un cuerpo alargado y segmentado, con un par de patas por segmento. La Scolopendra cingulata, típica de la región mediterránea, puede alcanzar tamaños de hasta 15 centímetros de longitud. Su cuerpo es de color marrón rojizo con patas amarillentas, lo que las hace fácilmente reconocibles.

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Hábitat y Distribución

Las escolopendras prefieren hábitats cálidos y secos como "la terreta", aunque también se encuentran en áreas húmedas. En Alicante, estos ciempiés gigantes habitan comúnmente bajo piedras, troncos, hojas caídas y otros lugares oscuros y húmedos que les proporcionen refugio durante el día. Son criaturas nocturnas, lo que significa que son más activas durante la noche, cuando salen a cazar.

Temporada de Mayor Actividad

Las escolopendras son más activas durante las estaciones cálidas, especialmente en primavera y verano. En Alicante, las temperaturas más altas de estas estaciones favorecen su actividad y su búsqueda de alimento. Durante el verano, cuando las noches son cálidas, es más probable encontrar escolopendras en busca de presas. En primavera, con el aumento gradual de la temperatura, comienzan a ser más activas después de la relativa inactividad del invierno. Aunque menos frecuentes, también pueden encontrarse en otoño, especialmente en áreas donde las temperaturas permanecen moderadamente cálidas. En invierno, su actividad disminuye considerablemente debido a las bajas temperaturas, y buscan refugios protegidos para pasar esta estación.

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Comportamiento y Dieta

Las escolopendras son carnívoras y se alimentan de una variedad de presas, incluyendo insectos, arañas, pequeños vertebrados y otros artrópodos. Utilizan sus forcípulas venenosas para inmovilizar y matar a sus presas antes de consumirlas. Estas forcípulas son grandes colmillos situados en la cabeza, que inyectan un veneno potente en sus presas.

Peligrosidad para los humanos: ¿son muy venenosas?

Aunque las escolopendras poseen veneno y sus picaduras pueden causar dolor intenso, no se consideran generalmente peligrosas para los humanos. La picadura de una escolopendra puede ser extremadamente dolorosa, con dolor que dura varias horas y puede estar acompañado de hinchazón, enrojecimiento y a veces ampollas en el área afectada. Sin embargo, rara vez son letales para los humanos.

Reacciones Alérgicas y Precauciones

Algunas personas pueden tener reacciones alérgicas al veneno de la escolopendra, lo que puede agravar los síntomas y requerir atención médica. Estas reacciones pueden incluir dificultad para respirar, hinchazón generalizada y anafilaxia en casos graves. Es aconsejable evitar manipular escolopendras y tener precaución en áreas donde se sabe que habitan. En caso de ser picado, es importante limpiar la herida, aplicar hielo para reducir la hinchazón y tomar analgésicos para el dolor. Si se presenta una reacción alérgica o los síntomas se agravan, se debe buscar atención médica de inmediato.

Importancia Ecológica

Las escolopendras desempeñan un papel crucial en el control de poblaciones de insectos y otros pequeños animales en sus ecosistemas. Su presencia ayuda a mantener el equilibrio ecológico, ya que son depredadores eficientes que contribuyen a la regulación de las poblaciones de sus presas.

Y es que, aunque las escolopendras, especialmente la Scolopendra cingulata, son una presencia común en Alicante y otras regiones del Mediterráneo, su peligrosidad para los humanos es limitada. Con una comprensión adecuada de su comportamiento y hábitat, es posible coexistir de manera segura con estas fascinantes criaturas, reconociendo su importancia ecológica y tomando precauciones en el caso de tener que "saludarlas" en alguna ocasión.