La Policía Científica le puso nombre y apellidos a los restos humanos descuartizados y quemados en Fontcalent -un hombre de 56 años- y los investigadores del Grupo de Delincuencia Violenta de la Policía Judicialidentificaron a una pareja como presuntos autores del crimen y ayer procedieron a su detención en Alicante. La Policía Nacional ha logrado resolver así, en menos de dos semanas, un complejo crimen que bien podría haber acabado en el baúl de casos sin resolver, como ocurrió hace años con otro torso encontrado en El Altet.
La investigación baraja un móvil económico como posible causa del crimen, pero no han trascendido datos concretos sobre el caso. Una de las hipótesis que comentaban ayer vecinos del barrio Virgen del Carmen es que la pareja detenida conocía al fallecido y pretendía quedarse con la casa de Fernando, «vecino de toda la vida» de las antiguas Mil Viviendas.
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De hecho, los sospechosos, una mujer de 51 años y un varón de 30, ambos españoles, fueron detenidos en la casa de la víctima, una vivienda social donde la Policía Nacional cree que se cometió el homicidio.
Investigación exitosa
La víctima del asesinato era un varón y no una mujer, como se pensó inicialmente cuando aparecieron el pasado 22 de junio la cabeza y extremidades calcinadas junto a una caseta de riego en la partida alicantina de Fontcalent. Tras aparecer el 17 de junio un torso calcinado en un camino rural de La Serreta, en Fontcalent, cinco días más tarde un hombre que paseaba a su perro descubrió los restos que faltaban del cuerpo. Pese a que también habían sido quemadas las extremidades y la cabeza, los especialistas de la Brigada Provincial de Policía Científica lograron identificar a la víctima por huellas, ya que constaban en los archivos policiales una antigua reseña del fallecido.
A partir de esta identificación, los investigadores del Grupo de Delincuencia Violenta (UDEV) de la Policía Judicial de Alicante comenzaron una carrera contrarreloj para capturar a los culpables del macabro crimen y las pesquisas no tardaron en dar sus frutos. Los agentes identificaron a dos sospechosos, una mujer y a un varón conocidos por la Policía en la Zona Norte de Alicante, sobre todo la mujer. Siguieron con sus indagaciones y una vez recabaron suficientes pruebas para proceder a la fase de explotación ayer se organizó un dispositivo para entrar en el domicilio de la víctima, situado en la calle Senador Alberto Pérez Ferré de Alicante, en el barrio Virgen del Carmen.
Agentes de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de la Brigada de Seguridad Ciudadana se encargaron de realizar la entrada inicial en la vivienda y en su interior estaban la mujer y el varón investigados como sospechosos. A continuación accedieron los investigadores del Grupo de Delincuencia Violenta y especialistas de la Policía Científica de la Comisaría General, desplazados desde Madrid, y de la Brigada de Alicante, así como una letrada de la Administración de Justicia para dar fe del resultado del registro e inspección de la vivienda.
Coche para trasladar el cuerpo
La inspección del domicilio de la víctima se prolongó desde primera hora de la mañana hasta poco después de las tres la tarde, cuando el hombre y la mujer fueron trasladados en sendos vehículos policiales hasta la Comisaría Provincial. Una grúa municipal también trasladó a dependencias policiales un pequeño turismo de los detenidos, vehículo que iba a ser examinado para comprobar si fue usado para llevar el cadáver descuartizado a Fontcalent, donde le prendieron fuego.
El registro policial fue presenciado durante toda la mañana por numerosos vecinos del barrio, varios de los cuales se mostraron sorprendidos por el asesinato de Fernando. «Era una persona que no se metía con nadie y apenas salía de su casa, porque estaba depresivo», según indicó un vecino. Otro vecino afirmó que la víctima fue agredida hace años por un hermano con el que convivía, el cual le arrojó ácido al cuerpo.