¿Te pueden negar embarcar en un avión si llevas mucho escote?

Una multa a una aerolínea despierta el debate sobre si hay una vestimenta adecuada para volar

Multan a una aerolinea por no dejar embarcar a una pasajera por su vestimenta.

Multan a una aerolinea por no dejar embarcar a una pasajera por su vestimenta. / PIXABAY

Vueling ha sido sancionada con una multa de 28.000 euros tras la denuncia presentada por Facua, según ha comunicado la organización de consumidores. Esta sanción fue impuesta por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) después de que se constatara que la aerolínea negó el embarque a una pasajera debido a su vestimenta, en concreto, por llevar un body escotado. Este incidente ocurrió en el aeropuerto de Palma de Mallorca, cuando la mujer se disponía a tomar un vuelo con destino a Barcelona.

El incidente se produjo cuando una agente de handling de Vueling informó a la pasajera que no se le permitiría abordar el avión debido a su atuendo. Pese a las protestas de otros pasajeros, quienes instaron a la agente a permitirle el embarque, la compañía aérea mantuvo su decisión y dejó a la pasajera en tierra.

Este comportamiento fue considerado por Facua como una práctica discriminatoria y con tintes machistas. La organización argumenta que ninguna normativa prohíbe la admisión de pasajeros basándose en su vestimenta, siempre que esta no atente contra el orden público.

Andar por el avión es esencial para prevenir los efectos negativos de volar.

Multa a una aerolínea por negar el embarque a una pasajera por su vestimenta. / PEXELS

Facua, en defensa de los derechos de la usuaria afectada, trasladó el caso a la AESA, alegando que se había vulnerado su derecho a viajar de manera injusta y discriminatoria. La asociación destaca que esta situación dejó a la pasajera en una "completa indefensión delante del pasaje", ya que no se le permitió ejercer su derecho a embarcar en el vuelo que había pagado.

El caso se remonta a 2019, pero no fue hasta octubre de 2020 que se resolvió el expediente sancionador. Facua ha recibido recientemente la notificación del resultado de la denuncia, que concluye con la multa de 28.000 euros impuesta a Vueling. Esta sanción se fundamenta en varios artículos de la Ley 21/2003, de 7 de julio, de Seguridad Aérea, que abordan infracciones relacionadas con la seguridad de la aviación civil, además de otros reglamentos europeos pertinentes.

La multa impuesta a Vueling refleja la gravedad de la infracción cometida al discriminar a una pasajera por su forma de vestir. AESA ha determinado que la actuación de la aerolínea violó los derechos de la pasajera y no se ajustó a las normativas que regulan el transporte aéreo.

Un avión de Vueling despega desde el aeropuerto de Barcelona.

Vueling ha sido multada con 28.000 euros por no permitir embarcar a una pasajera que vestía una camiseta escotada. / Ferran Nadeu

Facua ha expresado su satisfacción por la sanción aplicada, pero ha señalado que las cuantías de este tipo de multas deberían ser mucho más elevadas. La organización argumenta que, dado el volumen de negocio y los beneficios de Vueling, una multa de 28.000 euros resulta insuficiente para disuadir a la compañía de incurrir en prácticas discriminatorias en el futuro.

La situación ha generado un debate sobre las políticas de vestimenta en las aerolíneas y la necesidad de garantizar que no se utilicen para discriminar a los pasajeros. Facua insiste en que es fundamental proteger los derechos de los consumidores y asegura que continuará vigilando y denunciando cualquier práctica discriminatoria que atente contra estos derechos.

Este caso también ha puesto de relieve la importancia de que las aerolíneas respeten las normativas vigentes y actúen de manera justa y equitativa con todos los pasajeros. La sanción impuesta a Vueling por AESA sirve como recordatorio de que las empresas deben adherirse a las leyes de seguridad aérea y evitar cualquier tipo de discriminación.

Facua concluye que, aunque la sanción es un paso positivo, se requiere un mayor compromiso por parte de las autoridades y las empresas para garantizar que los derechos de los consumidores sean siempre respetados. La organización subraya la necesidad de incrementar las sanciones económicas para que tengan un efecto disuasorio real y eficaz, adaptándose al tamaño y capacidad económica de las empresas sancionadas.

La multa a Vueling de 28.000 euros impuesta por AESA resalta la importancia de combatir las prácticas discriminatorias en el sector del transporte aéreo. Este caso pone de manifiesto la necesidad de una mayor protección de los derechos de los consumidores y de sanciones más severas para asegurar que las aerolíneas cumplan con las normativas y respeten la dignidad de todos los pasajeros, independientemente de su vestimenta.