La mascletà de hoy: Luceros salta por los aires

Espectacular mascletà de la pirotecnia Fuegos del Mediterráneo con un terremoto al alcance de muy pocos y un bombardeo difícil de olvidar  

Así ha sido el terremoto de la mascletà de hoy domingo 23 de junio de 2024

Alejandro J. Fuentes

C. Pascual

C. Pascual

Se esperaba mucho de ellos, después de ser los grandes protagonistas de las Fallas de este año con un disparo que los veteranos calificaron de histórico, del más potente que se recordaba en el Cap i Casal, y no han defraudado en Alicante. Todo lo contrario. La pirotecnia Fuegos del Mediterráneo se ha encumbrado en Alicante, en una tierra donde siempre han exhibido su ADN: disparos muy potentes, con finales rotundos. Cada año, mejor que el anterior. Ya se han convertido en unos imprescindibles en Hogueras, y eso en apenas llevan unos años disparando en Alicante.

El espectáculo de este 23 de junio, en una jornada en la que no cabe más gente en el centro de la ciudad, ha hecho vibrar, de verdad, a la fuente de Luceros. La penúltima mascletà del ciclo difícilmente ha podido ser más intensa. El final ha sido de los que no se olvidan. Con un terremoto terrestre que parecía que nunca acababa, pero que no ha sido más que el prolegómeno de un bombardeo aéreo mítico. En total, seis minutos y once segundos, en los que se han quemado 126,8 kilos de pólvora, con una potencia máxima de 126,8 decibelios.

Pero las mascletás, por suerte, son mucho más que números. Son sensaciones. Y las de este domingo han sido de las que hacen historia. 

El disparo ha arrancado con una larguísima traca valenciana, que ha dado paso a una fase aérea correcta en su inicio, con truenos, serpentina y silbatos. Sin mucho más, ni tampoco menos. A los dos minutos ya se ha empezado a vislumbrar que no iba a ser un día de paso en Luceros. La intensidad del fuego aéreo ha ido ganando peso, hasta que el remate ha llevado la mirada al suelo

Y ahí ha empezado lo bueno. Las retenciones terrestres han ido ganando ritmo y potencia, con una recta final que parecía el terremoto de muchos otros pirotécnicos. Para Mediterráneo era el prólogo. 

Pasados los cinco minutos desde el inicio, lo que ya quedaba claro era que el disparo iba a entrar en concurso. Entonces las bocas se han abierto y los ojos se han cerrado, apartándose de la línea de fuego. Y todo de manera involuntaria por la potencia del terremoto, que ha hecho vibrar, y no es un decir, el suelo de Luceros

Y cuando parecía que ya estaba todo dicho, ha llegado el colofón: un bombardeo aéreo que cuesta imaginar cómo se puede mejorar. Eterno. Veremos si repetible. 

Una mascletà que pondrá muy difícil la victoria a cualquiera de los rivales. Sería la primera de los valencianos en Alicante tras años de méritos. Parece que solo los alicantinos Hermanos Ferrández pueden disputar el triunfo en un año de buen nivel en Luceros. Pronto se saldrá de dudas.

Y es que tras el disparo de este domingo, ya solo queda pendiente un último espectáculo pirotécnico en el entorno de Luceros. El concurso oficial de estas Hogueras arrancó el miércoles con Coeters Dragon (Villena). El jueves fue el turno de Pirotecnia Ferrández, de Redován, uno de los favoritos para el público alicantino. Después del disparo del viernes, el fin de semana empezó este sábado con Tamarit (de Alfarrasi, Valencia), los mismos que lanzaron el martes fuera de concurso y que en su segunda participación en estas Hogueras ofrecieron una propuesta muy amena. Tras la mascletà de este domingo de Fuegos Artificiales del Mediterráneo (de Vilamarxant), el concurso se cerrará este lunes con Hermanos Ferrández, los alicantinos con sede en Beniel (Murcia) acumulan seis triunfos en las últimas nueve ediciones.

Para aspirar a la victoria en el concurso, las mascletás deben tener una duración mínima de 5 minutos y 30 segundos sin contar los truenos de aviso, mientras que la duración máxima será de 7 minutos. Según el Ayuntamiento de Alicante, "el peso máximo autorizado de la materia detonante será de 80 kilos y la materia reglamentada de 150 kilos. El calibre máximo autorizado de los truenos de aviso y de las carcasas de trueno y demás artificios pirotécnicos será de 50 mm. El trueno terrestre y los volcanes tendrán un calibre máximo de 50 mm".