RECURSOS HÍDRICOS

La cuenca del Segura gana 10 hectómetros con las tormentas pero los embalses están bajo mínimos

Los pantanos alicantinos de la cuenca del Júcar, Amadorio, Guadalest y Beniarrés, se encuentran solo al 19% de su capacidad

Un frigorífico arrastrado por la crecida del río Segura

METEORIHUELA

D. Pamies

D. Pamies

Las tormentas, algunas de carácter torrencial, que descargaron la semana pasada en la cuenca Alta, Media y, en menor medida, Baja del río Segura han aportado 10 hectómetros extra a sus embalses según los datos semanales de la Confederación Hidrográfica del Segura. Es un volumen de agua de cierta relevancia tratándose del mes de junio, pero en ningún caso alivia significativamente el déficit estructural de recursos hídricos de la Región de Murcia y el sur de la provincia de Alicante.

Como avanzó INFORMACIÓN en algunos puntos de la Región de Murcia se llegaron a recoger hasta 100 litros por metro cuadrado de lluvia, sobre todo en la cuenca Media, provocando el desbordamiento de ramblas y barrancos y una nueva aportación de sedimentos al Mar Menor.

Gráfico de la CHS con el estado actua de las reservas del Segura

Gráfico de la CHS con el estado actua de las reservas del Segura / CHS

Así las reservas propias del Segura cuentan con 264 hectómetros cúbicos (hm³), diez más que la semana pasada. La cuenca se encuentra al 23,2% de su capacidad. El embalse del Cenajo es el que acumula más agua con 60 hm³ -es también el de mayor capacidad del sistema del Segura-, con un 14% de su volumen total de 437 hectómetros.

Dos hectómetros y medio recogidos directamente del río

El embalse de la Pedrera ha podido ganar dos hectómetros y medio de agua esta semana gracias a la derivación de caudales del río desde el azud de Ojós.

La CHS ha empleado la infraestructura del postrasvase, con el sifón de Orihuela -los tubos- entre las sierras de Orihuela y Hurchillo, al objeto de rebajar la crecida del río que alcanzó en Beniel, a las puertas de la provincia de Alicante, puntas de 60 metros cúbicos por segundo -cuando lo habitual es que no lleve ni cinco-, y aprovechar el caudal extra para reservar una parte en el pantano.

La Pedrera ha pasado de contar con algo menos de 50 hectómetros a algo más de 52 y se mantiene al 21% de su capacidad total de 246. Este embalse presenta la singularidad añadida de recibir aportaciones de la desaladora de Torrevieja y del trasvase del Tajo, que está desembalsando ahora a buen ritmo en plena época de riego.

Esta agua garantiza aproximadamente un tercio de la demanda de abastecimiento urbano, industrial y de regadío que necesita la cuenca. El resto debe completarse para abastecimiento de agua de boca y riego del trasvase Tajo-Segura y la desalación. La agricultura, además, completa sus necesidades con agua regenerada de las depuradoras y pozos autorizados.

Parte semanal de embalses del Júcar

Parte semanal de embalses del Júcar / CHJ

El Júcar

La situación de los embalses de la cuenca del Júcar de la que depende el interior y norte de la provincia sigue siendo también complicada. Los dos embalses del sistema de la Marina Baixa -Amadorio y Guadalest- no alcanzan en conjunto los 6 hectómetros.

El de Beniarrés, que regula las aguas del río Serpis y riegan después de la comarca valenciana de La Safor, han experimentado un leve incremento que no llega ni al medio hectómetro y permanece al 16,77% de su capacidad con 4,56 hectómetros del total de 27 que puede almacenar. Una aportación mínima teniendo en cuenta que algunas zonas de su cuenca vertiente -que han sufrido una sequía extrema en los pasados meses de invierno y primavera-, han recogido casi cien litros por metro cuadrado la semana del 10 al 17 de junio.

La mayor amplitud de esta cuenca hidrográfica, sin embargo, estructurada mediante un sistema de embalses distribuidos entre Valencia, Castellón, Cuenca, Tarragona y Teruel, cuenta con una reserva total que supera en conjunto el 53% de capacidad con 1.501 hectómetros. Esta circunstancia garantiza, por otra parte, el trasvase Júcar- Vinalopó, que capta sus recursos desde el azud de La Marquesa del Júcar en Cullera.